La soñada Ruta de África del Sur

Cuando has esperado tres largos años para hacer realidad un viaje soñado corres el riesgo de haber idealizado tanto el destino que nada de lo que veas o hagas se acercará a la imagen que has repetido en tu cabeza tantas y tantas veces sobre lo que te ibas a encontrar.

Leonas en el Parque Nacional de Chobe, Bostwana.

Por fin este verano llegaba el momento tan ansiado, en el que junto con mi pareja y otros aventureros como nosotros, nos embarcábamos en un viaje de la mano de un equipo guía especializado en África. La ruta comenzaba en Ciudad del Cabo, (Sudáfrica), para después continuar por Namibia, Bostwana y acabar en Zimbawe.

Familia de elefantes en Parque Nacional de Etosha, Namibia

El sur de África me ha fascinado sobrepasando todas mis expectativas viajeras. He vivido atónita algunos de los espectáculos naturales más maravillosos del planeta. Me he quedado boquiabierta observando a una familia de elefantes refrescarse en una charca en Etosha junto a una pareja de rinocerontes negros en una especie de danza de cortejo. Me ha sorprendido la grandiosidad del desierto del Namib. He descubierto el porte regio de los oryx y de las jirafas con sus largas pestañas paseando en Damaraland, (Namibia). Me he sobrecogido al estar cerca de los animales más peligrosos en el delta del Okavango: los silenciosos cocodrilos, los ruidosos hipopótamos y los salvajes búfalos. Y, de postre, he presenciado el festín de unas leonas con una cría de elefante en Chobe, (Bostwana). Me he quedado pasmada viendo las cataratas Epupa (Namibia) y las cataratas Victoria (Zimbawe). Y también he aprendido algunas tradiciones de la tribu himba y de los bosquimanos. Una experiencia que no olvidaré.

Rinoceronte en Etosha, Namibia

Juzgad por vosotros mismos, pero creo que, en esta ocasión, la espera ha merecido la pena.

Búfalos en Parque de Chobe, Bostwana.

Desierto de Namib

Cataratas Victoria, Zimbawe

Deadvlei, Namibia

Leones marinos en Cape Cross, Namibia

Cataratas Victoria, Zimbawe