Hola, amig@s,
Ya vamos terminando nuestra estancia en Grecia, seguimos viviendo una montaña rusa de emociones, mezclada con cansancio, satisfacción de aportar un poco de alivio a algunas personas y agradecidos por el inmenso cariño que recibimos de tantos maestros de vida que estamos conociendo, (la gran mayoría no miden más de un metro), y compartiendo el dolor de tantas personas con historias estremecedoras de vidas destrozadas por la guerra…
También, como os comenté, hoy hemos dejado a las dos familias refugiadas en un piso compartido, sencillo, una habitación para cada una… Se han ido con mucho miedo, nervios y tensión, de un campo inhabitable y difícil por su origen kurdo…no os podéis imaginar sus caras…indescriptible… Queremos agradeceros a todos los que estáis colaborando con este proyecto de acogida…
MUCHÍSIMAS GRACIAS DE VERDAD, DE CORAZÓN