Hoy ha vuelto a ser un día intensísimo y cada vez que pensábamos que no podíamos ver nada más increíble aparecía otra situación para gestionar… Hemos llevado a dos refugiados enfermos a hospitales, porque en el campo el servicio de atención médica sólo es hasta las 15:00h, (para 1.500 personas, y no hay servicio de urgencias, siendo que ninguno tiene posibilidad de tener coche ni hay transporte público), hemos estado apagando un incendio al lado del campo, hemos comprado comida para familias vulnerables, hemos hecho juegos y cine para niños… Y todo esto sin agua desde ayer y a 40°… Está siendo una experiencia muy intensa y cada historia personal que escuchas es tremenda, intentamos acompañarles, empatizar y abrazarles… Creo que es lo que más les ayuda…